Perfectos para fotografía deportiva, de naturaleza, nocturna, de paisaje… los teleobjetivos permiten fotografiar con comodidad escenarios que resultan muy lejanos a nuestra cámara y capturan momentos que sin estas ópticas sería imposible conseguir, como primeros planos de la luna o la intensidad de un partido de fútbol. Podremos conseguir estas imágenes con ópticas como este Sigma 740954, uno de los objetivos seleccionados por nuestros expertos.
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Antes de la compra de un teleobjetivo debemos plantearnos para qué queremos este tipo de lente y qué uso le vamos a dar. Hablamos en todo caso de ópticas que no son baratas y ofrecen unas prestaciones fantásticas en cuanto a velocidad y apertura, pero con un elevado coste. No es lo mismo buscar un objetivo de 70mm que uno de 200mm, por lo que es interesante valorar la opción de compra de una óptica de focal variable o fija si manejamos un presupuesto ajustado.
Compatibilidad. Es importante comprobar que nuestro objetivo es compatible con nuestro modelo de cámara.
Estabilizador. Como hablamos de grandes focales, es recomendable que el objetivo cuente con un buen estabilizador de imagen. De lo contrario, siempre recomendamos su uso con un buen trípode.
Factor de recorte. En este tipo de ópticas puede ser un punto a favor si nuestro objetivo no es full frame (de tamaño completo) y buscamos una focal larga, ya que debemos aplicar un factor multiplicador a nuestro objetivo para conocer su verdadero alcance. Por poner un ejemplo, si nuestra cámara viene equipada con un sensor que tiene un factor de recorte de 1,6x, debemos multiplicarlo por la focal del objetivo para conocer exactamente la distancia focal de nuestra lente: una óptica de 70mm en una cámara con un factor de recorte de 1,6x ofrecerá una focal de 112mm (70×1,6=112).
Luminosidad. A mayor apertura, más luminoso será nuestro objetivo. Esta característica es importante si vamos a fotografiar en condiciones de luz complejas.
Distancia focal. Podemos diferenciar estas ópticas en dos tipos de teleobjetivos:
Tamaño y peso. Estos objetivos suelen ser de gran tamaño y son bastante pesados, por lo que es importante pensar en un monopie o trípode para usarlo cómodamente.
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Este objetivo Sigma ofrece una focal de 85mm. No es un tele demasiado largo, pero es una óptica perfecta para tomar retratos y obtener un bokeh (desenfoque) perfecto.
Es una lente muy luminosa, ofreciendo una apertura de f:1,4, por lo que podremos emplearlo con comodidad cuando las condiciones de luz sean desfavorables.
Este teleobjetivo se ofrece para montar en cámaras Canon, aunque también es compatible para equipos fotográficos de Nikon.
Además, es un objetivo muy luminoso. Pertenece a la serie Art de Sigma, lo que indica que nos ofrecerá unas buenas prestaciones, con imágenes muy nítidas y buena precisión de enfoque, eliminando las aberraciones cromáticas.
Dispone de un motor de enfoque muy silencioso (HSM) que nos permite enfocar rápidamente los sujetos. Podremos también enfocar en modo manual con comodidad.
Su montura es robusta y resistente. Eso sí, debemos tener en cuenta que este objetivo es bastante grande y no es nada ligero, con 1,13 kgs de peso, por lo que será necesario una buena bolsa de transporte y un trípode para poder manejarlo con comodidad.
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Este 85mm es específico para equipos con sensores full frame y también APS-C. Este modelo puede ser utilizado en cámaras Sony-E, Canon, Fuji, Niko, Olympus y Sony A.
Este tele también es muy luminoso, con una apertura de f:1,4, perfecto para trabajar en condiciones de luz complejas. Incluye una lente asférica para evitar viñeteos de imagen, logrando imágenes muy contrastadas y nítidas. La estructura de su lente es de 9/7 y el tamaño del filtro de 7,2 cm
Podremos enfocar cómodamente en modo automático o manual. Como punto débil, no dispone de estabilizador de imagen, y su distancia mínima de enfoque es de 1 metro.
Es bastante ligero, y de poco tamaño, y pesa 513 gramos. Incluye parasol extraíble. Una buena óptica, a un precio ajustado.
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Esta óptica de focal variable nos ofrece una distancia de entre 70mm y 200mm, con una luminosidad bastante buena de f:2,8.
Viene equipado para equipos Canon, y está disponible para Nikon, Sony y Pentax. Es un objetivo bastante pesado, de 1,33 kgs. por lo que es importante preparar una buena bolsa de transporte y un trípode para emplearlo con comodidad.
Su construcción de lentes permite una baja dispersión del color, obteniendo imágenes muy contrastadas y nítidas. Ofrece enfoque en modo manual y automático con una distancia mínima de enfoque de 0,95 metros. Es una óptica de enfoque bastante rápido, aunque su motor de enfoque HSM es algo ruidoso.
Como punto débil, no incorpora estabilizador de imagen, aunque interpretamos que esta es una buena óptica de focal variable, y ofrece un rendimiento.
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Este tele largo permite una focal de 150mm-600m con una luminosidad algo baja, pero efectiva, de f:5/6.3, perfecta para captar imágenes de naturaleza y aves, acción o deportiva. Viene equipado para cámaras Canon, aunque también está disponible para modelos Nikon.
Ofrece un estabilizador de imagen y dispone de un buen motor de enfoque automático, muy rápido y silencioso.
A tener en cuenta que este tele tiene un peso de 3,86 kgs. y un buen acabado preparado para soportar inclemencias climáticas. Es perfecto para montarlo sobre un monopie y así trabajar cómodamente con él.
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Una de las opciones para poder alcanzar una distancia focal más larga es el uso de un duplicador o teleconvertidor, ya que multiplica la distancia focal de nuestro objetivo por 1,5x o por 2x.
Su funcionamiento es muy sencillo, puesto que simplemente debemos colocar el conjunto de lentes entre nuestra cámara y nuestro objetivo. Automáticamente nuestra óptica ofrecerá el doble de su distancia focal. En contraposición, al colocar unas lentes entre cuerpo y óptica, perderemos algo de luminosidad, aproximadamente un diafragma, aunque podemos compensarlo con el ISO sin mayor problema.
Este Sigma monta sobre cuerpos Nikon, y también está disponible para Canon, Sony o Minolta.
Es un convertidor muy ligero, de 145 gramos de peso. y su anclaje a la bayoneta es estable y robusto.
En relación calidad-precio, es una buena solución para conseguir una focal mayor de forma económica.
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